Nace en Santander, en 1974. Gran lectora desde que tiene uso de razón. Nieta del maestro tipógrafo Gonzalo Bedia, crece entre libros, pliegos y olor a tinta, lo que le hizo amar este bello oficio y del que formó parte, junto a su familia de impresores, orgullosa de seguir años después con el legado que su abuelo. No es hasta su fallecimiento, cuando inicia su andadura en la escritura. Montañera desde los 14 años, de carácter inquieto, intenta, a través de muchos de sus relatos, transmitir ese amor y pasión hacia la montaña que invade su corazón…

Colaboradora en varios de los libros corales de la SCE, finalista del concurso de cuentos infantiles “Tertulia Goya” en el año 2008 y 2013, segunda finalista del concurso de viajes Moleskin en 2016, con “Diario de una aprendiz de alpinista” y varias veces seleccionada en los concursos de microrrelatos, “Letras con arte”.

Reside desde hace varios años en el Valle de Manzanedo, al norte de Burgos. Desde este entorno privilegiado, tímidamente sigue aprendiendo el arte de narrar las emociones y sentimientos que emergen de lo más profundo de su alma…

“Búscame en las cimas, acariciando la piel rocosa que las viste, o al abrigo de su gélido regazo… ¡Allí me encontrarás!”.