El próximo jueves 13 de octubre a las 19,00h tendrá lugar la presentación del libro A los abuelos (Ed. Los Cántabros) en la Sala Mauro Muriedas de Torrelavega. Se trata de un poema ilustrado dedicado a todos los abuelos, cuyos autores son Fernando del Río Ruiz de la Prada (texto) y Eva Díaz Cueto (ilustraciones). En el acto, además de los autores, intervendrán Javier López Estrada (Alcalde de Torrelavega) y José Ramón Saiz Fernández (Presidente de la Sociedad Cántabra de Escritores).
Su origen se encuentra en el colegio Sagrados Corazones de Torrelavega, de cuyo claustro forman parte desde hace más de 20 años el autor del poema y la ilustradora. Una de las muchas actividades que se llevan a cabo en el citado colegio es el día de los abuelos. Una jornada en la que docentes y alumnos de Educación Infantil rinden un merecido homenaje a esas personas tan especiales que se han convertido en una pieza fundamental en la sociedad del siglo XXI. Si desde siempre han sido importantes figuras de referencia en nuestras familias, hoy en día se han convertido en imprescindibles tanto por el cuidado que realizan con sus nietos como por el auxilio económico que prestan a sus hijos, llegado el caso.
Hace más de una década sus compañeras de Educación Infantil le pidieron a Fernando que escribiera algo para ese día tan especial que pudiera formar parte de esa jornada tan bonita. Un escrito que tuviera como centro la figura de los abuelos y la relación tan especial que tienen con sus nietos. Y así fue como se puso manos a la obra dando como resultado el poema cuyos protagonistas son los abus, los titos, los elos o los tan cántabros güelos o güelitos.
Con el paso del tiempo, y habiendo publicado su primer libro (Mi conducta política, Ed. Los Cántabros, 2020), el autor cayonés decidió plasmar el poema en un libro que atravesara las paredes del colegio y pudiera llegar a cuantas más familias mejor, y eso ha sido posible gracias a las divertidas y emotivas ilustraciones de Eva Díaz Cueto. Unas imágenes que llenan de vida y color un libro, A LOS ABUELOS, que nació en el corazón, fue tomando forma en la cabeza y se materializó finalmente con las manos.
