"La salud es lo primero", recuerda el doctor Hernandez Úrculo en la librería AMICA

Por Isidro Cicero

Es médico de atención primaria, pero lleva un tiempo jubilado. Ejerció esa modalidad de la Medicina durante muchos años en el Centro de Salud Zapatón. En su día fue el presidente de SEMERGEN, Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria, intuyo yo observando la literalidad del anagrama, que a esta Sociedad la cambiaron de nombre y que antes se llamó de Medicina General. Quizá me equivoque. Úrculo fue secretario de la Sociedad Cántabra de Escritores hasta 2019. Antes había formado parte de la Junta Directiva en varios mandatos.

Hoy vino a colaborar con su Sociedad Cántabra de Escritores – es autor de numerosos libros – como voluntario, como dependiente en la Librería Solidaria de AMICA / SCE.  A uno, un perfil tan sólido y tan definido como el de José Hernández Úrculo le invita a preguntarle por la pandemia y por cómo ve las cosas a partir de ahora. A uno le asalta el temor de haber desaprovechado la oportunidad de escuchar a un médico con años de experiencia a sus espaldas. Los médicos ahora han revelado a la sociedad su verdadero rostro de profesionales imprescindibles, hombres y mujeres profundamente humanos, técnicamente admirados. Quizá haya nuevas ocasiones. Hoy tengo que limitarme a hablar con el doctor Úrculo como un voluntario más de la Librería Solidaria.

¿Cuáles son a tu juicio las principales enseñanzas que nos ha dejado la experiencia del coronavirus por la que acabamos de transitar?

Que somos vulnerables. Que en bastantes ocasiones la gente ha sabido ser solidaria con los que estaban en peor situación en plena pandemia

La segunda semana de marzo nos vimos obligados a interrumpir las actividades de la Librería Solidaria de AMICA / Sociedad Cántabra de Escritores en Torrelavega. Como voluntario de este proyecto, ¿qué supuso para ti aquella decisión?

Que hay que anteponer la salud ante todo. Por tanto, resignación y esperanza.

¿Cuáles son ahora tus sentimientos personales al reabrir la Librería y volver reanudar tu colaboración como voluntario?

Ilusión y ganas de colaborar

¿Cómo has vivido personalmente el confinamiento?

He estado al cuidado de mis tres nietos pequeños, pues sus padres trabajaban (dos de ellos, en el hospital). He sentido la frustración de no poder colaborar como voluntario en las labores asistenciales por la dedicación que te he dicho.

¿Has dedicado mucho tiempo del confinamiento a escribir?

No me ha sido posible por lo anteriormente expresado

¿Y a leer?

Tampoco mucho, aunque he releído El laberinto español, de Gerald Brenan, que analiza la situación española y su contexto en los prolegómenos de la Guerra Civil española, desde un punto de vista de ciudadano extranjero. Valoro su intento de objetivar el contexto de la situación social y política de España en ese período de una forma transversal, aunque le sobran algunos tópicos.

También releí y aun sigo con ello, los Episodios Nacionales, de Pérez Galdós. Me sigue pareciendo una forma genial de analizar la historia de España del siglo XIX, su evolución social y política, de manera novelada y asequible. Son lecturas muy recomendables.

¿Estás satisfecho de cómo te ha cundido el tiempo de confinamiento?

No, porque no he podido hacer cosas que hubiera querido, aunque me queda la satisfacción del cariño de mis nietos.

Con motivo de tu presencia hoy en la Librería Solidaria, ¿qué dirías a las personas para que acudan a la Calle Coro Ronda Garcilaso de Torrelavega a comprar algún libro?

Que la lectura es imprescindible para todo ser humano

¿Animarías a otras personas a que se sumen a colaborar en este proyecto Sociedad Cántabra de Escritores / AMICA?

Por supuesto que sí.