Como vamos haciendo desde hace mucho tiempo la Sociedad Cántabra de Escritores, el martes, 21 de marzo, saludamos a la primavera de la mejor manera que sabemos: leyendo poesía para alegrar los corazones y exaltar emociones. Una fiesta por todo lo alto. Este año tuvo una peculiaridad que es importante destacar; dicen que “la unión hace la fuerza” y, como verdad absoluta, la acatamos. El Centro de Mayores de la Inmobiliara, Ramiro Bustamante, tuvo la gentileza de invitarnos a realizar dicho evento en su centro, contando también con ellos para sumar ideas y trabajo: Resultado magnífico con letras mayúsculas. Sin olvidar al Ayuntamiento de Torrelavega que nos facilitó todo el material necesario para llevar a cabo dicho evento y también, al finalizar, obsequiándonos a todos los asistentes con un lunch.

El recital se inició a las cuatro de la tarde en el patio del Centro de Mayores, y las primeras voces poéticas las pusieron los más pequeños, leyendo, incluso, poemas propios. Alumnos de varios colegios: los Torreones de Cartes, José Luis Hidalgo, Cervantes, José María Pereda, el Mayer… Y el Centro quiso ofrecerles unas viandas compensatorias por su participación. Damos las gracias a los maestros que les acompañaron.

A partir de las cinco de la tarde, hubo un relevo generacional muy emocionante. La suma de voces alcanzó una extensa participación: poetas, políticos, aficionados a la lectura poética. Quiero resaltar la presencia de Consuelo Fernández, poeta de más de 90 años, socia del Centro de Mayores y residente en el Asilo de nuestra ciudad. Llegó, acompañada por dos trabajadoras de la residencia y nos recitó sus poesías. Se la rindió un pequeño homenaje por parte del Ramiro Bustamante y de la SCE, obsequiándola con flores y el poemario Amaneceres.

Una tarde llena de encanto y mucho público vibrando al unísono.

El broche de esta fiesta poética: cena en el restaurante El Refugio para continuar declamando versos.

Hasta el año que viene.