Víctor Abascal: “Si el covid enseñó algo, fue resistencia”

Por Isidro Cicero

“Resistiré, resistiré, resistiré”. A las alturas del 14 de julio ya casi se nos ha olvidado que todas las tardes de todos los meses del confinamiento, había una palabra que dominaba sobre todas las demás: Resistiré. Cuando le pregunto a Víctor Abascal cuál es la enseñanza general básica que hemos podido extraer de la desgracia global, no lo duda un momento: La capacidad de resistir.

Víctor Abascal es nuestro voluntario de los libros de hoy, la persona que se encarga esta tarde de las actividades de nuestra Librería Solidaria. Pronuncia de nuevo la palabra “resistir” y con ella nos devuelve las enfermeras heroicas, los médicos, los dependientes de supermercado en primera línea, los repartidores, los transportistas, los cuidadores de ancianos, los niños encerrados, los telemaestros, las teleeducadoras.

Y también a los que no lo han podido resistir. Son miles y miles. Ninguno de nosotros, los que ejercemos voluntariado, los olvidamos, pero tenemos que hacer lo posible porque no lo se les vaya de la mente a todos los demás. Que lleven la mascarilla y que guarden las normas sin falta.

El pasado 23 de enero hizo Víctor Abascal su primera guardia en la librería solidaria. Con ese motivo escribí un boceto literario sobre su persona que titulé DISCAPACIDAD PARA A. SUPERCAPACIDAD PARA B, C, L, y H. (Lo puedes encontrar en el enlace https://m.facebook.com) .

Otra vez estamos refiriéndonos al meollo mismo de la cuestión, conviene repetirlo, porque si hemos montado la Librería Solidaria y todo el tinglado de voluntarios y voluntarias, personas comprometidas, es porque estamos convencidos de que a quienes tienen una incapacidad física o mental, no hay otras, se les puede ayudar a que desarrollen otras capacidades, como hace AMICA. Víctor lo sabe bien, su padre padecía incapacidad visual, pero dominaba la música, numerosos instrumentos, leía miles de libros y era un educador magnífico.

Víctor, ¿cuáles son a tu juicio las principales enseñanzas que nos ha dejado la experiencia del coronavirus por la que acabamos de transitar?

Si se puede decir, que algo tan nefasto como es el covid-19 ha servido para dejar alguna enseñanza, yo citaría la de fortalecer el grado de resistencia a la adversidad.

La segunda semana de marzo nos vimos obligados a interrumpir las actividades de la Librería Solidaria de AMICA / Sociedad Cántabra de Escritores en Torrelavega. Como voluntaria de este proyecto, ¿qué supuso para ti aquella decisión?

La frustración de romper con una actividad de ayuda a personas que lo necesitan.

¿Cuáles son ahora tus sentimientos personales al reabrir la Librería y volver reanudar tu colaboración como voluntaria?

La satisfacción de reanudar ese especial sentimiento como es hacer el bien.

Portada del boletín de AMICA. Víctor Abascal aparece en el centro de la foto, entre Marisa Caballero e Isidro Cicero.

¿Cómo has vivido el confinamiento? ¿Puedes referir tus preocupaciones personales, profesionales, familiares, sociales?

Supongo que en este sentido ha habido muy poca diferencia entre las personas. Impotencia, preocupación y resignación, esencialmente.

¿Con qué disposición anímica te reincorporas al voluntariado?

Con fuerza y optimismo.

¿Has dedicado mucho tiempo del confinamiento a escribir?

Menos de lo que hubiera querido. En mi caso, una buena parte del tiempo, lo he empleado en cosas, que en circunstancias normales se dejan más abandonadas.

¿Y a leer?

Por lo mismo que acabo de decir, más bien poco. He leído un libro titulado Cuando salga la luna, de un compañero nuestro, José A. Álvarez Gómez (seudónimo: José Carrieto), y que recomiendo. Da una visión de los aconteceres de la Guerra Civil desde un ángulo imparcial. Demuestra que las personas buenas lo pueden ser desde un signo u otro en el que militen.

¿Lo recomendarías a otras personas?

Desde luego.

¿Estás satisfecho de cómo te ha cundido el tiempo de confinamiento?

Supongo que como al resto, el tiempo se ha alargado un poco más.

Con motivo de tu presencia hoy en la Librería Solidaria, ¿qué dirías a las personas para que acudan a la Calle Coro Ronda Garcilaso de Torrelavega a comprar algún libro?

Que van a tener una satisfacción múltiple. Disfrutar de lo que significa la lectura, cooperar a una causa estupenda y, en consecuencia, sentirse emocionalmente bien.

¿Animarías a otras personas a que se sumen a colaborar en este proyecto Sociedad Cántabra de Escritores / AMICA?

Claro que sí. De hecho, lo hago en cuanto tengo ocasión.