Con 88 años, demostró en su ejecutoria como escritor un conocimiento profundo y exhaustivo, gracias a su permanente investigación, del mundo deportivo de Cantabria. Inigualable en sus conocimientos y en su tesón en conocer y difundir su gran sabiduría por el deporte en general. Nunca hubo secretos para él en su perseverante labor que todo gran escritor sabe realizar.

Vinculado al deporte desde hace casi setenta años, en sus obras recoge la gran historia deportiva de nuestra comunidad y de sus protagonistas, los deportistas, que tantas alegrías nos han ofrecido. En este sentido, no podemos olvidar su obra en la que recopiló las «gestas» de los nada menos que 63 deportistas cántabros que han competido en los Juegos Olímpicos y las 18 medallas logradas (cinco oros, siete platas y seis bronces) para que sean recordadas «siempre», gracias a la paciente y fructífera investigación de Armando.

Este fue el gran objetivo de Armando con su obra Familia Olímpica de Cantabria tras haber dedicado gran parte de su vida a ser organizador de pruebas deportivas, creador y patrocinador de equipos de diferentes disciplinas y a ocupar diversos puestos federativos desde los que se volcó con tesón y honradez a tan sacrificadas tareas.

Aun recordamos lo que dijo en 2014 al presentar esta importante obra: «Disfrutad con nuestros olímpicos. Es nuestra historia». Fue en la presentación a la que acudieron las primeras autoridades de Cantabria y el presidente del Comité Olímpico Español.

Armando escribió otros libros de gran interés para el deporte cántabro. Su contribución es inmensa y esta gran labor la queremos recoger en estas sentidas líneas.

La Junta Directiva de la Sociedad Cántabra de Escritores en nombre de todos los asociados, expresa a sus hijas, hijos políticos, nietos y amigos, nuestro gran pesar por su fallecimiento, al tiempo que informamos que el funeral por su eterno descanso se celebra mañana, sábado, a las 17 horas, en la iglesia parroquial de Cigüenza (Novales). La capilla ardiente se puede visitar en la sala 9 del Tanatorio de Nereo en Santander.